"Un preso que hablaba de Stanislavski" Colección Novísima Biblioteca
Nº 11 Un preso que hablaba de Stanislavski
es uno de esos títulos sudamericanos, que prometen una
historia seductora con la que tomarse un mojito y mecerse a la
fresca de la tarde, pero es más; es la historia del detenido
Delio Boix, quien había hecho teatro y cine, pero la mayor
parte de las veces era el teatro lo que le llenaba hasta el borde
el vaso de las horas muertas. Es un hombre duro, "yo también
tengo genoma, y se me está hinchando", que cree que
ya lo ha visto todo en la vida hasta que descubre que hay un policía
para demostrar que el límite de la ineptitud puede ser
superado. La raíz de sus males podía estar en una
mujer, Estela, un animal asustadizo, turbador y salvaje en distancias
cortas; o en Eva, quien debía ser su amante, De ser cierta
la sospecha, ella sabría cualquier cosa que les faltase
en la investigación. Y todo era entonces Eva, presagio
o retorno de Eva, Eva en el sofá leyendo acostada, Eva
comiendo una manzana indiferente a cuantos paraísos pusiese
en peligro. |
Santiago Gª Tirado, ilicitano nacido en
Linares, en 1.967. Conocedor de autores clásicos y modernos,
de lo culto y lo popular, viajero, enamorado de la vida, enemigo de
las medias tintas, desde sus primeros textos publicados apuntó
los modos de esa escuela milenaria de autores movidos por el raro placer
de contar.
Al concederle el premio Teruel por el relato Un fotógrafo en
la siesta, Javier Reverte se manifestó sorprendido: "Es
difícil encontrar un cuento tan redondo". Sánchez
Dragó destacó su "prosa restallante", y la construcción
de una estructura "casi perfecta". Se trataba del reconocimiento
a la madurez de su estilo. Con ese mismo aliento nos presenta su nueva
obra, Un preso que hablaba de Stanislavski.